Telefónica terminará el año con un balance positivo en términos de energía y carbono. Y es que la compañía prevé superar su objetivo de ser 50% renovable al final de 2018. Este ritmo, hace estimar a la firma que en 2019 se superará el 70%.

Si Telefónica terminó 2017 con un 47% de energías renovables, este año llegará al ecuador de sus objetivos. Para conseguirlo, la compañía se ha servido de Brasil, México y Chile, donde se han producido los mayores avances. A partir de noviembre, el 100% del consumo de energía de Telefónica en Brasil provendrá de fuentes renovables, con la obtención de energía renovable certificada. Y en diciembre, contará con generación distribuida de energía proveniente de CGHs (Centrales Generadoras Hidroeléctricas) en el área de concesión de la Compañía Energética de Minas Gerais – CEMIG. Así, Vivo reducirá un 65% sus emisiones de CO2 a partir de 2019.

Este Plan de Energía Renovable implicará que el grupo experimente un ahorro potencial del 6% en la factura de energía en 2020, y hasta un 26% en 2030. Respecto al impacto medioambiental, se evitarán cada año alrededor de 1,5 millones de toneladas de CO2 a la atmósfera en 2030.

En México, Telefónica ha empezado a consumir energía del parque solar más grande del país, KAIXO Solar. Gracias a ello, el 40% del consumo de electricidad de la compañía en el país será renovable. En países más regulados como Chile, Telefónica compra un 20% de su energía eléctrica en el mercado libre, lo que le ha permitido optar por un suministrador renovable. En Uruguay y Costa Rica, la compañía ha seguido potenciando el uso de energía solar y ya es casi 100% renovables gracias al mix de generación del propio país.

Además de la compra, Telefónica tiene más de 4.000 estaciones base que funcionan con energía renovable, y en países como Uruguay la compañía está apostando por vender la energía limpia excedente de su actividad a la red de distribución eléctrica.

Además del Plan de Energía Renovable, Telefónica cuenta con el Programa de Eficiencia Energética con el objetivo de cumplir los compromisos globales de la compañía en Energía y Cambio Climático para el periodo 2015-2020, avalados por la iniciativa Science Based Targets (SBTi) por contribuir a la reducción de emisiones de CO2 establecida en el Acuerdo de París.

Dicho programa tiene como finalidad reducir en un 50% el consumo de energía por unidad de tráfico, un objetivo que se consiguió en 2017; Comenzar a desligar el crecimiento del negocio de las emisiones de gases de efecto invernadero, disminuyéndolas un 30% en términos absolutos para 2020 y un 50% para 2030; ahorrar 90 millones de euros por proyectos de eficiencia energética; y apostar por las energías renovables como fuente sostenible para el negocio, usando el 50% de la electricidad de fuentes renovables en 2020 y el 100% en 2030.

Fuente: Eseficiencia

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